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¡Un caballito hecho con un calcetín!



Corta el palo y deja el lado redondeado por fuera (así evitaremos que se ralle el suelo), rellena  el calcetín y  cósele  unas orejas de fieltro, haz unas crines de lana esponjosa, los ojos con  unos botones, la boca márcala con hilo grueso  y hazle unas  riendas con una cinta y adórnalo con todo lo que vuestra imaginación os pida. Y antes de que os lo imaginéis tendréis vuestro caballo listo para salir a galopar.

Más información en: http://www.lightbluegrey.blogspot.com.es/2011/01/lets-diy.html

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